Cuando llegaste nos devolviste la alegría que tanto necesitabamos, partido a partido nos fuiste ganando hasta convertirte en un símbolo, nos hiciste creer que todo es posible y que por muy mal que vayan las cosas siempre sale el sol.Tú hiciste posible ese ascenso soñado después de 10 años en el infierno, la permanencia de la temporada siguiente con ese final tan emocionante, esa victoria inolvidable en el Bernabeu con el gol de Miguel de las Cuevas.
Recordamos miles de anécdotas contigo como cuando te escondias ese cigarrin en el banquillo, tu alegría y buen humor, esas ruedas de prensa que no dejaban indiferente a nadie, pusiste en su sitio a cualquiera que se atreviera a dudar de nuestro Sporting, ese eras tú Manolo, una persona cercana para todo el mundo, dejaste huella en todos y cada uno de nosotros.
El día de tu destitución muchos nos echamos a la calle para darte nuestro apoyo, estuvimos contigo en los peores momentos como tú lo hiciste con nosotros, no entendimos la decisión y mucho menos la compartimos. Ese día, en tu despedida, dijiste que serías del Sporting hasta que murieras y te creimos, lo hicimos porque en cada palabra o gesto se notaba el amor que tenías a este escudo al que durante 6 años diste tantas alegrías.
La vida no fue nada justa contigo y aun así jamás perdiste las ganas de seguir luchando por tí y por los tuyos, nunca te rendiste, por eso también eres un ejemplo para todos, por tu fuerza y tus ganas de vivir.
Hoy 4 años después seguimos llorando tu muerte, seguimos recordándote y echándote de menos. Jamás te olvidaremos Manolo, todo lo que consigamos será por y para ti.
